El hombre del túnel
12 April, 2010, 07:45 - -Toque humano, Arquitectura / Escultura, -Cantabria, Citas/textos
Avanzaba a trompicones durante lo que me parecieron horas, días enteros, palpando las húmedas paredes de esa angosta cavidad sumida en la más profunda oscuridad sin saber a dónde iba, desorientado, con esperanza de dar con el camino correcto de aquellos interminables pasadizos que se ramificaban cada pocos metros.El nerviosismo y la histeria aumentaban a cada paso, la extenuación y el pánico hacían que las piernas se volvieran temblorosas y descoordinadas bajo un irregular suelo que en más de una ocasión me llevó a desplomarme y magullar mis maltrechas rodillas, pero el dolor y el escozor que emanaba de ellas era algo secundario, no había tiempo para lloros ni lamentaciones, la prioridad no era esa...había que seguir avanzando...
El recuerdo de cómo y por qué comenzaba a emborronarse, los pensamientos no estaban claros pero sí le recuerdo a él, el causante de esta situación, la ira recorría mi cuerpo y era consciente de cómo se me aceleraba el corazón al visualizar su angulosa y huesuda cara...¿Por qué yo? ¿Era realmente una casualidad o era fruto de una meticulosa planificación? La paranoia comenzó a brotar, las piezas iban encajando torpemente, tal vez esa fuera la respuesta, aquella tarde de verano de hace dos lejanos meses...
Un nuevo tropezón frenó en seco mis elucubraciones, esta fue la gota que colmó el vaso, tendido en el suelo las lágrimas comenzaron a recorrer mis mejillas; cada vez era más consciente de que ese sería el último lugar que vería...tras tomarme un tiempo para desahogarme, nuevamente me puse en pie.
Tal vez fuera un delirio, pero percibía un ambiente más limpio, menos cargado, como si la salida estuviera cerca...tras más de una decena de pasos un ápice de luz se vislumbraba en aquel pasadizo infinito, nuevamente el corazón se aceleró, el pausado ritmo de mi caminar se tornó en carrera avanzando ágilmente hacia la luz...los ojos no eran capaces de asimilar la ingente cantidad de luz del fondo de la galería tras tanto tiempo en la más absoluta negrura.
Poco a poco comenzaba a distinguir los detalles de los pedregosos pasillos que había recorrido durante horas, días...el túnel descendía ligeramente, me impedía ver de dónde provenía aquel resplandor, seguí andando hasta que por fin vi aquello que llevaba tanto tiempo ansiando, la salida.
Estaba cerca, las lágrimas humedecían mis ojos y entorpecían la visión, cien metros me separaban de la libertad...de repente frené en seco, todo mi cuerpo se estremeció, una sensación de frío me invadió...me quedé paralizado al discernir una figura humana entre la luz, envuelta en lo que parecía un halo místico, pero no era eso lo que sentía.
De pronto dio un paso hacia mí y fue entonces cuando le reconocí; era él, el hombre de cara huesuda y angulosa...el cerebro me ordenaba correr pero las piernas no respondían; se acercaba a mí...no quería volver a las tinieblas, pero no había más remedio, sin duda prefería eso a estar frente a él.
Volví a adentrarme en las entrañas de su morada, el único sonido que alcanzaba a escuchar era el de sus lentas pisadas tras de mí, una nueva sensación me embargó...una enorme frustración, casi pude tocar con las yemas de los dedos la escapatoria.
Nunca creí que iba a apresurarme para volver adentro...noté su presencia, estaba realmente cerca, pero ni siquiera quería girar la cabeza, de nada serviría, era cuestión de tiempo que todo llegara a su fin...
Espero que os guste el pequeño relato que he escrito especialmente para esta fotografía, ya que creo que así lo merece y en vista a algún comentario, aclarar que no es un HDR, montaje o similar...es fruto de muchas carreras y del rango dinámico de la 5d MKII.
14 comments »
( 2684 views )
permalink
( 3 / 3187 )